Enclave

El enclave. Alcazaba y Castillo de Gibralfaro

La Alcazaba y el Castillo de Gibralfaro, forman parte de un enclave estratégico que revela su importancia en el dominio sobre la ciudad de Málaga durante el asentamiento islámico.

Málaga responde a un modelo histórico de ciudad abierta a una bahía rodeada por las estribaciones meridionales de los Montes de Málaga, y atravesada en su centro histórico por el río Guadalmedina. El monte de Gibralfaro nombre que proviene del árabe gibal al-faruh –(giblafaruh- monte del faro), tiene 130 metros de altitud. Inicialmente se le ha considerado de origen fenicio cuyo asentamiento se extendía desde la ladera de Gibralfaro hasta la calle Císter y los Jardines de Ibn Gabirol y por el sur hasta el mar. Confirmándose a través de los restos encontrados, la existencia de una ciudad plenamente consolidada y amurallada datada en el siglo VIII a.C., contemporánea al importante enclave comercial del Cerro del Villar situado en la desembocadura del río Gualdalhorce.

Posteriormente las fuentes clásicas, mayoritariamente descripciones de viajes de época griega y romana, cuando describen el emplazamiento de Malaka, Mainake y Malaca -púnica, griega y romana-, siempre mencionan un promontorio que domina la ciudad y que sirvió de punto de referencia para la navegación. No fue hasta el asentamiento islámico que la estructura urbana de la ciudad se configura en torno al monte tal y como lo conocemos actualmente con el Castillo de Gibralfaro en su cima, en su falda la Alcazaba, la Coracha y los Jardines de Puerta Oscura.

En conclusión, estamos ante un monte que se erige en el centro de la vida y de la configuración de la morfología urbana de la ciudad islámica, constituido por la medina, la Alcazaba, el Castillo de Gibralfaro y los arrabales.

No es casual que la importancia de privilegio estratégico que ofrecía el monte de Gibralfaro junto al hallazgo de construcciones defensivas anteriores, ofreciera ser el lugar idóneo para construir la Alcazaba, cuyo nombre, al-Qasba significa fortaleza urbana. Inicialmente fue construida como fortificación y luego acabaría convirtiéndose en palacio-fortaleza, sede del gobierno de la ciudad.

Se ha constatado que fue durante la Taifa malagueña cuando parece remontarse lo más antiguo que ha llegado hasta nosotros. Después del dominio durante medio siglo de los Hammudíes, la Taifa fue incorporada a la granadina en 1057, cuando su rey Badis, trazó el perímetro de la Alcazaba, de planta irregular muy alargada, condicionada por el terreno sobre el que se construía. El control de la medina y de las posibles incursiones llegadas a través de la bahía, provocaron que desde un primer momento la fortaleza se concibiese como poder militar y organización administrativa, con unas peculiaridades determinadas que cumplían este tipo de construcciones. De este modo con la construcción de la Alcazaba se aseguraban la presencia física del poder sobre la ciudad, a la vez que se mantenía separado por ella a través de su estructura arquitectónica, rodeada de murallas, siendo una construcción prácticamente infranqueable como así pudieron constatar las tropas cristianas en la toma de Málaga por los Reyes Católicos.

Situado en la cima del monte de Gibralfaro domina toda la ciudad. Desde siempre esta fortaleza fue la mejor atalaya para observar la población asentada a la falda del monte y los accesos a ella por tierra y mar. Se tiene constancia de restos de un antiguo recinto fenicio que contenía un faro que daba nombre al cerro Gibralfaro (Jbel-Faro, o monte del faro). La fortaleza fue ampliada y convertida en castillo por el rey nazarí Yusuf I en 1340, construyéndose para albergar las tropas y proteger a la Alcazaba en los asedios. En su momento fue la fortaleza más inexpugnable de todo Ál-Ándalus.

En esta época el monte estaba totalmente desprovisto de vegetación para facilitar su defensa y las posibles emboscadas que se pudieran realizar. El único acceso era el que se realizaba desde una puerta monumental, a la que se accedía desde la Coracha y que comunicaba con la barbacana que rodea todo el perímetro exterior.